Monóxido de carbono

El monóxido de carbono es un gas peligroso que se produce cuando los sistemas de calefacción no funcionan correctamente. El monóxido de carbono no sabe a nada, no huele a nada y no se puede ver, lo que lo convierte en algo muy peligroso. El monóxido de carbono puede acumularse en el interior de una casa debido a una combustión incompleta. Puede causar enfermedades graves e incluso la muerte.

Síntomas de intoxicación con monóxido de carbono:

  • Enfermedad repentina similar a la gripe
  • Mareos, dolor de cabeza, somnolencia
  • Náuseas o vómitos
  • Latidos cardíacos perceptibles o intensos
  • Labios color rojo cereza, rostro inusualmente pálido
  • Pérdida del conocimiento

Si sospecha que usted u otra persona están intoxicados con monóxido de carbono:

  • Saque inmediatamente a la víctima de la casa y llévela al aire libre.
  • Llame al 911 o a un servicio de asistencia médica de emergencia.
  • Saque a todas las demás personas de la casa.
  • Abra las ventanas.

Para evitar la intoxicación con monóxido de carbono:

  • Esté atento a los síntomas de intoxicación con monóxido de carbono.
  • Instale alarmas de monóxido de carbono, manténgalas en buen estado y cámbielas cada cinco años.
  • Nunca haga funcionar motores de combustión interna en interiores.
  • Nunca use una parrilla de carbón en interiores.
  • Haga inspeccionar los aparatos de combustión, los conductos de humo, las ventilaciones y las chimeneas con frecuencia.

Alarmas de monóxido de carbono (CO)

Asegúrese de que su casa esté equipada con alarmas de CO en buen estado de funcionamiento.

  • La ley de Illinois exige que todas las casas y los apartamentos tengan una alarma de CO a no más de 15 pies del área de los dormitorios.
  • Para más seguridad, considere instalar una alarma de CO en cada dormitorio.
  • En las casas de dos pisos, instale al menos una alarma de CO en cada nivel.
  • Si su hogar tiene un sótano, instale una alarma de CO en la parte superior de las escaleras que conducen a él.
  • Cambie las baterías de las alarmas de CO cuando comienza el invierno y luego cada seis meses.
  • Reemplace las alarmas de CO que tengan más de cinco años.